/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisa/KVJGK66XGZBS5DL5VSS5NGDT5U.jpg "Levi’s abrió su cinturón para dar propinas a sus vaqueros")
La Comisión Europea lleva meses señalando a X (antigua Twitter) como la plataforma donde circula más desinformación y mensajes de odio, pero el enfado de Bruselas es mucho mayor desde el estallido violento en Oriente Medio. La comisaria europea de Valores, la checa Vera Jourova, dijo el miércoles en el Parlamento Europeo que está viendo “un dramático auge del contenido antisemita en plataformas de internet” y que “X, la antigua Twitter, parece particularmente mal en hacer frente a este desafío”.
Su colega el comisario de Mercado Interior, el francés Thierry Breton, soltó la advertencia y recordó a Elon Musk, propietario de X, que ya habían enviado una reclamación formal para que explique qué va a hacer contra la desinformación y los mensajes de odio. Llegados al choque, la normativa en vigor permite a la Comisión Europea imponer multas multimillonarias (de hasta el 6% de los ingresos globales de la empresa) y en último término prohibirla en Europa.
El problema no existe sólo en X y los comisarios señalaron también a Google, Facebook, TikTok y Youtube, pero X es, para la Comisión Europea, el principal foco de desinformación y mensajes de odio y la plataforma que menos hace para impedir que se difundan esos mensajes. Algunos eurodiputados recordaron el miércoles que en X han llegado a circular mensajes acusando a Israel de haber usado armamento atómico contra los palestinos.
Otros diputados denunciaron que cada vez es más fácil encontrar imágenes de cadáveres y personas mutiladas y otros que hacen llamamientos a asesinar judíos o musulmanes.
El comisario Breton se dirigió directamente a Musk en X el pasado 10 de octubre pero este le respondió diciendo que la Comisión Europea debería enseñarle, también en Twitter, quejas explícitas y no generalistas. Haciendo que en Bruselas el enfado crezca porque consideran que Musk se cree por encima de la ley.
El multimillonario estadounidense aseguró, según informaciones del medio ‘Insider’, que estaría dispuesto a bloquear el acceso a la plataforma a los usuarios residentes en la Unión Europea o simplemente apagar su plataforma en Europa, una decisión que le sacaría de uno de los mayores mercados mundiales de publicidad y que fuentes comunitarias consideran que es una amenaza inconsistente.
El enfado en el Parlamento Europeo parece estar llegando a niveles no vistos con ninguna otra empresa. Varios eurodiputados exigieron a Breton que no espere más a eventuales respuestas de Musk y que aplique ya la ley imponiéndole la multa más alta posible, ese 6% de los ingresos globales de la empresa en el último año completo, 2022.
Una pequeña minoría, principalmente de eurodiputados de extrema derecha y un puñado de extrema izquierda, aseguraron que Musk es sólo un defensor de la libertad de expresión y que la Comisión Europea intenta activar una censura masiva.
Bruselas no parece querer frenar ni mucho menos dar marcha atrás y el miércoles exigió a los 27 gobiernos nacionales del bloque que activen todas las palancas legales a su disposición para borrar de internet la mayor cantidad de desinformación posible “dada las extraordinarias circunstancias”. Europa teme sobre todo los discursos antisemitas. El bloque no olvida su historia.