El policía Derek Chauvin, condenado por el asesinato en 2020 del afroestadounidense George Floyd, fue apuñalado en prisión este viernes, informó el diario The New York Times citando dos fuentes anónimas.
Chauvin, que es blanco, se arrodilló sobre el cuello de Floyd durante más de nueve minutos en una calle de Minneapolis a pesar de sus súplicas antes de morir, en un caso que desencadenó masivas protestas por justicia racial ese año.
Los gritos de Floyd de «no puedo respirar» se convirtieron en un reclamo de los manifestantes que salieron a las calles tras el asesinato.
La Agencia Federal de Prisiones confirmó a la AFP una agresión, sin revelar el nombre de la persona herida.
«Una persona encarcelada fue agredida en la Institución Correccional Federal (FCI) de Tucson», en el estado de Arizona, indicó en un comunicado.
«Los empleados que respondieron iniciaron medidas para salvar la vida de un individuo encarcelado», explicó el boletín. Este individuo fue enviado a «un hospital local para su posterior tratamiento y evaluación», agregó.
Chauvin fue declarado culpable de asesinato en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio en segundo grado en 2021, y condenado a 22 años y medio de prisión.
La muerte de Floyd, que quedó grabada en video, contribuyó a impulsar además una importante discusión sobre el racismo y la actuación policial en Estados Unidos y en todo el mundo.
Una investigación posterior del Departamento de Justicia sobre la Policía de Minneapolis, cuyas conclusiones se publicaron en junio de 2023, afirmó que sus agentes recurrían habitualmente a prácticas violentas y racistas, «incluida la fuerza letal injustificada».
Minneapolis, en el estado de Minnesota, en el Medio Oeste de Estados Unidos, también resolvió una demanda por homicidio culposo interpuesta por la familia Floyd y acordó pagar 27 millones de dólares.
Chauvin apeló su condena por asesinato en segundo grado, pero su recurso fue rechazado por la Corte Suprema a principios de este mes.
«A fin de cuentas, todo el juicio, incluida la sentencia, fue una farsa», declaró desde la cárcel en un documental reciente.